- ATENCIÓN A TRASTORNOS DE LA PERSONALIDAD
Es necesario dar una respuesta inmediata a los Trastornos de Personalidad, que encuentran dificultades para ser atendidos en los dispositivos de salud mental, y que sin embargo acarrean gran sufrimiento para los afectados y sus familias.
- PACIENTES PRIVADOS DE LIBERTAD
Es urgente dar una solución a aquellas personas con enfermedad mental que por diferentes circunstancias (abandono del tratamiento, falta de seguimiento…) han protagonizado algún delito y han sido internados en el Psiquiátrico Penitenciario, ya sea preventivamente o una vez sentenciados, cumpliendo la pena o medida correspondiente.
Consideramos que los usuarios de Salud Mental deben depender siempre de Salud, nunca del Ministerio de Interior.
Por todo ello, no estamos de acuerdo con la existencia de Psiquiátricos Penitenciarios, que tanto se asemejan con los antiguos manicomios.
- INMIGRACIÓN
Personas que vienen sin familia y se encuentran perdidos en un país desconocido, individualista e indiferente.
- MUJER
Las enfermedades mentales prevalecen de igual forma en hombres y mujeres, sin embargo son menos los casos de mujeres afectadas que llegan tanto a los dispositivos sanitarios como sociales; existe un mayor ocultamiento de la enfermedad entre las mujeres, tanto por parte del paciente como de la propia familia. En este sentido, la Salud Mental debería incluir una perspectiva de género consistente en la actuación con la propia mujer que padece un trastorno mental grave, así como con su familia, ya que son las menos participan de los recursos sociales y ocupacionales específicos para este colectivo, y la que más sufre la marginación en todos sus aspectos: el desempleo, la pobreza, la falta de vivienda, el aislamiento social, el estigma y la discriminación.
- REHABILITACIÓN SOCIAL
Reivindicamos una rehabilitación integral, en los distintos aspectos que definen la normalización en la vida de las personas: integración social, inserción laboral, acceso a la vivienda, salario digno o pensión digna (actualmente está fijada en 328 € al mes).
Por lo que hay que converger con el gasto social europeo (la diferencia entre España y la Europa de los 15 estaba en casi siete puntos).
Lo más preciado que tiene el ser humano es la dignidad, y por ella hay que luchar.
- ESTIGMA
Determinados factores arraigados en la sociedad, no siempre relacionados directamente con la salud mental, están asociados a la existencia de mitos y estereotipos que generan el estigma:
Realizar generalizaciones erróneas sobre grupos de personas.
Etiquetar y categorizar a las personas: Realizar juicios de valor fijándose sólo en las apariencias.
Predisposición a la burla y el menosprecio de aquello que se aparta de lo normal.
Aceptación acrítica de estereotipos transmitidos socialmente.
Incapacidad para apreciar la diversidad individual en el desarrollo de la enfermedad mental.
Vincular excentricidad, excepcionalidad y diversidad con lo patológico.
Asociación entre enfermedad mental y exclusión social.
Recelo a ser vinculado con alguien que tiene una enfermedad mental.
Temor ancestral al enfermo mental. Miedo del ser humano hacia lo impredecible y desconocido
Asociación, en algunos ámbitos, entre lo psiquiátrico y lo sobrenatural.
Escasez de información y sensibilidad: Desconocimiento sobre la enfermedad mental
Discriminación administrativa sobre aspectos rehabilitadores y laborales.